viernes, 29 de marzo de 2013

Cinco canciones que debes escuchar. (I)

Hoy abro una nueva sección que es la evolución de mi TOP de canciones. Áquí está claro que voy a hablar de canciones, pero intentaré que sean poco conocidas, ya sean canciones de bandas no muy populares o album tracks de artistas mainstream. Allá voy:

5.- How To Destroy Angels - How Long?
Simple y minimalista. Así es como puedes describir el tema hasta el estribillo, que puedo asegurar que pone los pelos de punta. El vídeo también es un puntazo.
4.- M.I.A - Paper Planes.
Uno de los singles de más éxito de M.I.A, y un clásico instantáneo. La dejadez al cantar de M.I.A y el sonido de cajas registradoras y pistolas lo hacen un tema peculiar y divertido. Seguramente, muchos lo conocéis, pero los que no, tenéis que hacerlo ya.
3.- Bastille - Pompeii.
Uno de mis más recientes descubrimientos. La canción de por sí es pegadiza, pero el continuo coro masculino hará que se te pegue a la cabeza. Tremenda.
2.- Woodkid - Run Boy Run.
Run Boy Run muestra perfectamente lo que es Woodkid: melodías sencillas con una producción de infarto. Y es que difícilmente podrás resistirte a la percusión de este tema. Y ya, por si necesitas enamorarte un poco más, el vídeo te cautivará del todo. 

1.- Yeah Yeah Yeahs - Sacrilege.
Lo sé, lo sé; he hablado de ella hace nada. Pero es que Sacrilege es sencillamente marvillosa. En realidad el tema es una balada, pero la voz modificada de Karen que canta junto a su voz normal y el coro gospel (24 miembros) la convierten en uno de los temas del año. Y ni hablar del vídeo.


jueves, 28 de marzo de 2013

Adele - 21, o cómo ser suave y sutil y tener éxito.

En el arte, (literatura, arquitectura, pintura...) siempre que aparece una corrente, surge al poco una completamente alterna. El Romanticismo y el Realismo, el Renacimiento y el Barroco, etc. Y en la música no puede ser de otro modo. Vivimos en una época en la que el electropop está en pleno apogeo. Los beats, los puentes dubstep, las letras relacionadas con fiesta y sexo, la provocación, todo eso está a la orden del día. Y entonces te preguntas, ¿cómo una tía que ni provoca, ni hace electropop, ni habla de sexo puede tener tanto éxito? Pues por el contraste. Entre tanto dance surge el pop con soul de Adele que vale como descanso, como la música en la que te apoyas cuando todos los temas suenan igual y hablan de lo mismo. Y si la palabra "Adele" se ha oído mucho en 2012, no hablemos del número "21", su segundo disco con el que ha conquistado el mundo.

Abre el álbum con Rolling In The Deep, el primer single. Un tema que no necesita un vídeo provocador, una producción de infarto o una promoción abrumadora. Es una composición magistral, y eso lo ha colocado como el hitazo que es. Sencillamente soberbia. 10/10.
Rumour Has It es el tema más diferente. La percusión, la estructura, todo. Es bueno, pero ya aviso que a lo largo del disco se vuelve todo muy monótono y hubiese hecho más falta entre los últimos tracks. 8/10.
Turning Tables y Don't You Remember suenan demasiado parecidas. Aún así, la primera es mejor, quedándose con un 6,75/10. La segunda queda renegada al 6/10.
La perfección tiene nombre: Set Fire To The Rain. Tan melancólico, tan invernal, tan bueno. 9,5/10.
Continuamos con He Won't Go. Es el tema más soul del disco, y es imposible que ese estribillo no te enamore. Preciosa. 9/10.
Otra preciosa balada es Take It All. El problema es que Adele parece desinflarse, ¿nos dará algo nuevo o nos quedaremos dormidos antes de que acabe el disco. 8/10.
Llega I'll Be Waiting, que no es tan lenta como el resto, pero que sigue sin ser nada nuevo. Comienza el aburrimiento. 6/10.
Con One And Only te preguntas "¿no había escuchado ésta ya?". 6/10.
Las guitarras españolas de Lovesong parece que vienen a cambiar un poco todo. Sigue sin sorprendernos, pero el toque latino sienta bastante bien. 7/10.
Y llega la otra maravilla, el single que tantísimo ha sonado, el quemado Someone Like You. Puede que sea por la sencillez, por la voz rota de Adele junto al piano, por la letra con la que tanto puedes identificarte. Sea como sea, si tienes que enamorarte, lo harás de esta canción. 10/10.
Muy soul se pone Adele con If It Hadn't Been For Love. Bonita, pero nada más. 6,75/10.
Y para terminar el disco, la aburrida Hiding My Heart echa por tierra los logros de esta última parte de 21.  5/10.

21 es un disco lleno de temazos y de aburrimientos. Podríamos calificarlo de irregular, pero sus temazos son sin duda obras de arte y este disco merece más la pena que la discografía de muchas de las popstars de hoy en día. Bravo, Adele.

"Guess she gave you things I didn't gave to you."

Ellie Goulding - Halcyon, cuando un disco muestra lo mejor y lo peor de un artista.

La peculiar voz de Ellie, junto a la electrónica que buscaba algo más que reventar pistas de baile, hicieron que consiguiese ganarse un puesto en la abarrotada industria pop, puesto que consolidó con su hitazo Lights. Ahora, nos presenta su segundo disco. ¿Está a la altura?

Comenzamos con Don't Say A Word. Oscura, con inspiraciones tribales, con un fuerte toque de Florence + The Machine. Se consolida como un tema experimental, que más que buscar ser un tema en sí mismo, es una introducción al disco. Sin un estribillo demasiado definido, busca ser un resumen de lo que vamos a escuchar en la primera parte del álbum. Muy buena. 8/10.
Entrando de lleno al álbum nos encontramos con My Blood. El tema al principio es imposible que no te guste, pero cuando llega a la parte de los coros, te enamora. No podemos dejar de lado la inspiración en Florence Welch y su banda, pero eso no significa que My Blood  no sea un tema maravilloso; definitivamente, lo es. 9/10.
Anything Could Happen, el primer single, es un tema odiado por muchos y amado por otros. Es bastante techno, mucho en comparación con sus anteriores temas. Sin embargo, también es muy "Ellie". Ese estribillo electrónico, casi dubstep, hecho por la voz de Ellie sin que se pueda decir ni que canta ni que es instrumental es sencillamente brillante, un soplo de aire fresco al quemado electropop. A mí me parece buenísima, un temazo. 10/10.
El tema más pop del disco es Only You. Usa el recurso de Anything Could Happen de usar la voz de Ellie como acompañamiento musical, y le añade unos beats muy poperos. Not bad. 7,5/10.
El siguiente tema, Halcyon, es la muestra perfecta de tema destrozado por la producción. Vale, que Ellie siempre ha sido de guitarrita, pero si nos muestras temazos electrónicos como Lights o My Blood, esto aburre. 6/10.
Hacía mucho que no escuchaba una canción rápida que me emocionase, pero Figure 8 ha conseguido que vuelva a sentir esa sensación. En cuanto el estribillo explota, te haces esclavo de esta canción. 10/10.

Cuando oigo hablar de este disco, siempre me hablan de dos partes: la electrónica, y la cursi. Y es totalmente cierto. A partir de aquí, los beats se convierten en guitarra, los grandes temas con arreglos corales se vuelven temas sencillos y la emoción se vuelve aburrimiento.

JOY no tiene mucho que dar, salvo una sensación de adormilamiento que continua casi en los cinco temas restantes. 5/10.
Hanging On parece una demo, queda como un tema que podría haber dado mucho más de sí. 6/10.
Explosions es lo contrario a Halcyon, la producción es muy buena, pero el tema es tan aburrido que ni así se salva. Una penita. 5,5/10.
Más tarde llega I Know You Care, que es la mejor de esta parte. No da nada nuevo, pero el piano se funde con la bonita melodía y produce algo que no te duerme del todo. 7/10.
Después de que te preguntes qué c*ño ha sido Atlantis, Ellie se decide a dormirte con Dead In The Water. Ambas se quedan con un triste 4/10.
Llegamos al final del disco con I Need Your Love, en el que Calvin Harris mete mano para que sea un tema muy parecido a Lights, sin ofrecer nada nuevo dentro del panorama del electropop, pero que nos despierta bastante. 8/10.

El segundo disco siempre es muy difícil, y si no, que se lo digan a Lady Gaga. Es donde tienes que mostrar que las genialidades del primero no han sido casualidades, sino frutos de tu talento. ¿Lo consigue Goulding con Halcyon? En parte, sí. En Halcyon vemos a una Ellie fuerte, más madura y genial que nos da temas electrónicos soberbios; y a una Ellie que se niega a renegar de sus sosos temas del pasado. Es un buen disco, que no perfecto, con una buena dosis de temazos sin dejar de lado la faceta experimental. Y, para mí,  es más que suficiente.

"Cause I don't want to be a ball and chain, no."

Yeah Yeah Yeahs - vídeo de Sacrilege, o cómo hablar de dobles morales de forma original.


Tengo que decir que no conocía a los Yeah Yeah Yeahs. También tengo que decir que he escuchado unos cuantos temas antiguos, y ninguno me ha convencido. No es mi estilo, supongo. Sin embargo, con Sacrilege fue amor a primera escucha, y el vídeo no hace más que aumentar mi admiración por el tema.

La primera vez que veas el vídeo, no vas a enterarte de absolutamente nada. Tendrás que hacer uso de los comentarios que explican el vídeo, y aún así, seguirás sin verlo claro. Ya por la tercera vez, te darás cuenta de que el hilo temporal de la historia está dado la vuelta; el principio del vídeo es el final de la historia, y viceversa. Ahí ya entiendes varias cosas, como que al cura le peguen un tiro al principio, o que ella se case al final del vídeo (con el cura presidiendo la ceremonia).
La trama es sencilla: la chica se casa, se lo monta con todo el pueblo y no es hasta que se lo monta con el sacerdote cuando la matan a ella y a él. No tiene tramas secundarias, no nos plantean más que esta historia, y, sin embargo, nos muestran varios dilemas morales. ¿Es justo matar al cura (poniendole una máscara de demonio y haciéndole correr mientras le pegan un tiro) cuando todos ellos se han acostado con la chica? ¿Es moral quemarla a ella cuando todos ellos sabían que estaba casada y aún así no les importó tener una noche de pasión con ella?

Los Yeah Yeah Yeahs (y Megaforce a la dirección) se han marcado un gran vídeo, con una interesante trama, un significado oculto y, sobre todo, una brillante edición. Bravo.

martes, 12 de marzo de 2013

Azealia Banks - #YungRapunxel, o cuando evolucionas mal.

Existen dos tipos de artistas: los que se mantienen siempre en su estilo, a veces llegando a ser exitosos pero fracasando en cuanto su estilo se pasa de moda; o los que cambian, que pueden perder muchos fans con cada disco pero, si se lo montan bien, pueden ganar otros nuevos. Parece que a Azealia, el primer grupo no le va. La rapera que más se pelea de la industria, la del pelazo, ha sacado nuevo single, otra vuelta de tuerca a su rap, y eso que, oficialmente, solo tiene un EP, una mixtape y este primer single. ¿Quieres saber qué me ha parecido?

Lo primero que he pensado al escuchar #YungRapunxel (o Yung Rapunxel, como quiera que se escriba) es "Madonna". Y no, musicalmente no tiene nada que ver, pero sigue la técnica que tanto usó Madonna hasta Confessions On A Dance Flor y que tan bien le funcionó: coger un estilo diferente, adaptarlo al suyo y sacar un disco distinto al anterior. Sin embargo, a ella, la Reina del Pop, una artista ya asentada, no siempre le fue bien (Erotica, American Life...), así que, Azealia, ¿cómo pretendes que a ti, una rapera que no es conocida salvo por los amantes de lo indie, te salga bien la jugada con un single tan poco comercial?
El tema es, cuanto menos raro. Es muy machacón, muy house, pero no de la forma en que lo ha hecho anteriormente, sino un poco arrítmico, con beats que parecen puestos un poco al azar (¿qué c*ñ*o es ese sonido de lluvia y rallos?). Pero bueno, siempre podría salvarlo un buen rap y volverlo un No Church In The Wild. Pero no, ella le añade unos gritos que, si bien quedaron estupendamente en 212, aquí son una de las rarezas de este tema que recuerda a Marilyn Manson por todos los lados. Ya, para añadirle la guinda, the icing on the cake, le mete una parte susurrada en la que parece Beyoncé en Videophone.
En definitiva, que el tema no evoluciona, suena muy monótono, demasiado hardcore, con mucha inspiración a Marilyn Manson (escuchad mOBSCENE si no lo creéis) y con un rap demasiado minimalista para la gran capacidad que tiene Banks.

Total, que aunque admiro las ansias evolutivas de Azealia, tiene dos campos que podría haber explotado un poco más: el rap en el que el house y el r&b se unen de una forma sutil y exquisita (212, Liquorice) o el rap en el que los noventa dan unas bases divertidas, entretenidas e interesantes (Atlantis, Jumanji, Fierce). Y además, mucha evolución, pero esto no es más que un 212 más hardcore, con una estructura menos interesante y mucho, muchísimo menos eficaz.

"Danger, danger, danger."