jueves, 3 de enero de 2013

Florence + The Machine - Ceremonials, el disco serio de la banda.


No soy un seguidor de F+TM desde sus principios. Es más, los descubrí el verano de 2012, y al principio me daba mucha pereza escucharlos. Sin embargo, es una banda que necesita tiempo; no entra demasiado rápido, al principio incluso te parece demasiado monótona su música. Sin embargo, después de escucharlos muchas veces, te acostumbras a la peculiar -y magnífica- voz de Florence, a la música con melodías épicas y producciones de película de Tim Burton. Y ahí ya te han captado.

El primer disco, Lungs, era más desenfadado. Tenía esas letras simples que esconden conceptos más profundos, ese toque épico, etc. Pero con Ceremonials, las letras se vuelven menos divertidas y sencillas, y la música parece más seria, con un sonido menos parecido al primer disco de Marina & The Diamonds. Pero no por ello es peor, ni mucho menos.

El disco se abre con Only If For A Night. Según se cuenta, trata sobre un sueño de Florence en el que su fallecida abuela la visita, alentándola de que siga luchando. Sea como fuere, el tema representa bastante bien el contenido del disco, y es una buena forma de comenzarlo, sin una intro demasiado larga.
No tarda en llegar uno de los puntos fuertes del álbum. Con Shake It Up, la banda se marca uno de esos temazos que duran para siempre. Frenético, un clásico instantáneo, aquí Florence se quita los demonios de la espalda y se libera.
Una vez liberada, aconseja a su amor liberarse en What The Water Gave Me. "No me abandones". "Deja que el único sonido sea el de la inundación". Otro de los grandes temas del álbum, no por nada es el primer single.
En Never Let Me Go, Florence nos cuenta cómo los brazos del océano la salvaron. "Aunque la presión sea difícil de llevar, es la única forma que tengo de escapar. Parece una decisión difícil de tomar, pero ahora estoy debajo de todo". Aunque la interpretación es libre, yo creo que está claro que habla del suicidio. Lo mejor de todo es como Florence habla de morir ahogada, en la paz de las profundidades, y el coro a la vez canta "No me dejes ir". Sencillamente perfecta.

Cuando llegamos a Breaking Down, la primera canción escrita únicamente por Florence (aunque ésta sea la escritora principal de todos los temas del álbum), el sonido nos recuerda más al debut de la banda. Líricamente, sigue el toque pesimista de Never Let Me Go, comparando la soledad con 'algo' a lo que desde niña tuvo miedo, algo que trepa por las farolas y la coge de la mano en los bosques de peras. Un tema tranquilo, en cuyo estribillo una lánguida Florence suelta un 'ooooooh' con tal dejadez, que se te queda grabado en la mente.
No está claro sobre quién se habla en Lover To Lover. En el primer verso, cambia de primera persona a segunda, aunque después el resto está narrado en primera. Sea quien sea el personaje del que se habla, éste ha pasado la vida deambulando por las callas, de amante en amante, y aunque ahora es consciente de que no va a salvarse, de que no va a volver a ver el cielo entre las nubes, le da igual. Un tema tranquilo, siguiendo bastante la línea de Breaking Down aunque quizás con algo menos de gancho. Aún así, vamos a pasar al séptimo track y aún no nos hemos sentido decepcionados ni una sola vez.
Volvemos a hablar de temazo con No Light, No Light. En este tema, Florence explica que no sabe cómo contar en lo que se ha convertido a su amor. Sin embargo, en el estribillo la historia varía; ya se lo ha contado, y a pesar de ser de día, no hay luz en los ojos azules de su amante. "Porque es tan fácil contarlo delante de una multitud, pero es tan difícil, mi amor, decírtelo a ti en alto". Pasará a la historia.

El tema principal de la película Hermosas Criaturas (2013), Seven Devils, es también una de las canciones favoritas de los fans. Y no es de extrañar, la unión de esa base melódica con toques de película de terror del estribillo con la dejadez al cantar de un coro presidido por Florence es muy eficaz. No se sabe quiénes son los siete demonios de los que habla Florence. Podría ser una referencia a la película El Exorcismo De Emily Rose, en el que se habla de seis demonios: Caín, Nero, Judas, Legión, Belial y Lucifer. Sin embargo, ¿quién es el séptimo? Pues imaginamos que, según la frase "estaba muerta cuando me levanté esta mañana", el séptimo demonio sea la misma Florence. También se podría pensar que habla de los siete pecados capitales. Sea como sea, el caso es que esos demonios quieren que Florence destruya el reino de la persona a la que va dirigido el tema para salvar su alma. En definitiva, un tema desconcertante y oscuro.
Uno de mis temas favoritos del disco es Heartlines, en el que el pesimismo pasa a un segundo plano y Florence habla de fluir como el río, de seguir las líneas de la mano. Que el destino te lleve. "Tu corazón es el lugar al que llamo hogar".

El último single de Ceremonials, Spectrum, es uno de los grandes temazos que se esconden detrás de la oscura -y bonita- portada. Sea cual sea el espectro al que se refiere Florence, es uno bueno, que los llenará de luz y color. Todos necesitamos a veces que nos entre un espectro de esos.
All This And Heaven Too es una sencilla canción que habla de cómo la cantante daría todo por entender el lenguaje del corazón. No es que sea una mala canción, pero entre todos los temazos que nos hemos encontrado -y los que nos faltan-, resulta un pequeño bajón, nada importante.
Otro de mis temas favoritos del disco es Leave My Body, comparando el cuerpo con una relación llena de mentiras. Es una canción que suena genial, casi como un himno, con toques de soul y la dejadez que ha marcado gran parte de los mejores temas de Ceremonials.
No sabemos qué es lo que dice Florence que la hace dejar de ser anónima, el caso es que en Remain Nameless, desea con todas sus fuerzas continuar 'sin nombre". Un tema tranquilo que, sin ser malo, no nos extraña que forme parte de la edición Deluxe.
Strangeness And Charm no es, líricamente, la mejor canción del disco. Sin ser mala (no repite "you are a stupid hoe" hasta el agotamiento), no tiene el encanto de las letras del resto del álbum, en las que Florence cuenta algo de forma tan metafórica que la interpretación se hace libre; sino que aquí está claro: le dice a su amor que sienta su rareza y su encanto. Aún así, el tema es una bomba, con mucha reminiscencia al primer álbum. No debería haberse quedado como un bonus.
A veces ocurre que tracks que podrían haber sido singles, se quedan en la edición deluxe. Es el caso de Beedroom Hymns. Es como un vídeo de Lady Gaga, Florence dice muchas cosas que parecen no tener sentido, uniéndolo todo a la religión. Sea el que sea el significado, estos himnos de dormitorio son demasiado maravillosos como para quedar relegados a la categoría de bonus.
Después de la demo de What The Water Gave Me, pasamos a un tema inédito en formato de demo, Landscape. Sea lo que sea lo que le ha pasado a la protagonista del tema, ya no puede ver el paisaje. No es un tema brillante, pero el hecho de que sea una demo le da un atractivo especial. Tras tres maravillosos acústicos (Heartlines, Shake It Out y Breaking Down), termina el disco.

En definitiva, Ceremonials es un gran disco, con muy buenas letras y música emocionante, todo ello sumado a la magnífica voz de Florence Welch. Esperemos que en su tercer disco den un ligero cambio que les haga seguir siendo interesantes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario